martes, 30 de octubre de 2007

BWT Barcelona: Crítica del ABC

Peterpanismo y cortinas de humo

La historia está llena de casos así, de bandas que deciden echar el freno a su carrera y, cuando se animan a volver, descubren con pasmo y sorpresa que su público ya no está donde lo dejaron. Algo parecido les ocurrió el sábado a los británicos Take That en su primera y única actuación en España: sólo 12.000 personas se animaron a medio llenar el Palau Sant Jordi para rescatar sus recuerdos de adolescencia en compañía de la banda que coronó la liga del pop adolescente y anda ahora jugándose la permanencia noche tras noche.
Es lo malo de ser un grupo generacional: pasa el tiempo, el público crece y, con los años, empieza a preocuparse más por llegar a final de mes que por rescatar las pegatinas que decoraban su carpeta escolar una década atrás. Aun así, el regreso de los de Manchester fue, contra toda pronóstico, un deslumbrante ejercicio de prestidigitación escénica y derroche de producción. Las canciones, siempre a caballo entre las baladas a cuatro voces y los números de funk mantecoso, acabaron siendo lo de menos en una noche repleta de ingeniosa pirotecnia audiovisual.
No han escatimado ni un solo euro los británicos en un retorno que compensa lo liviano de las composiciones y lo anacrónico de algunas coreografías -las de «Sure» y «Give Good Feeling» eran de chiste- con un fastuoso montaje que, a su paso por Barcelona, tocó techo con la fabulosa interacción entre pantalla y escenario de «Never Forget». Lo nunca visto: Gary Barlow, Mark Owen, Jason Orange y Howard Donald entrando y saliendo en tiempo real de uno de sus vídeoclips. Impresionante.
Fue el colofón a una noche de cuartetos de cuerda y bailes de disfraces; de pianos de cola emergiendo de la nada y pasarelas levadizas conectando el escenario principal a otro más pequeño situado en el centro de la pista; de bolas de espejos gigantes y ritos paganos con llamaradas y bailarines en trance... Fue, en fin, una noche de vistosos efectos especiales y cortinas de humo con los que la banda británica demostró que, a pesar de su más que evidente complejo de Peter Pan, se puede plantar las puertas de la cuarentena con cierta dignidad.

Fuente: ABC

2 comentarios:

jennic dijo...

Ímbeciles manipuladores

jessibackforgood dijo...

muy fuerte! resulto q voy yo toda digna al abc a plantar mi comentario de protesta a la crítica..y....como??pero si el que lo ha escrito...es amigo mio!!! hace tiempo q no le veo pq se fué a barcelona...pero si le cojo..le doy dos collejas!